martes, 29 de abril de 2008

Más adioses

Se acaba de marchar Diego también.
El invencible, el creativo, el amigo, el tremendo Diego que enviaba abrazos en la distancia y que colocó aquí sus hermosas palabras cuando percibió dolor ajeno.
Y el mundo se ha vuelto un poco más miserable y más solitario.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí, amiga mía, el fluir que cesa y no cesa...Como diría Octavio Paz...

Me vi al cerrar los ojos:
espacio, espacio
donde estoy y no estoy

Ánimo.

A.Ruiz dijo...

Las palabras hermosas y atinadas siempre dan ánimo. Y las personas como tú, mucho más.
Gracias