domingo, 3 de septiembre de 2006

Carteros sin cartas

Leo a ratos una novela, ópera prima de Pablo Caballero (Caballo de Troya, 2006), con un largo título: "Cartas clandestinas de un cartero casi enamorado". Es un libro alejado de lo que se estila, o sea, con estilo.
Y leo ahora una noticia que parece escapada de una novela, o un cuentito. Un cartero de Messina, en Sicilia, guardaba en su casa dos toneladas y media de cartas sin repartir. Llevaba nueve meses sin entregar el correo a los vecinos pero, eso sí, lo atesoraba todo ordenado, en cajas.
La noticia no aclara si abría esas cartas destinadas a otros, si era un romántico o sólo un vago redomado.
En cualquier caso, me ha parecido curiosa la coincidencia, aunque el titular de la noticia sea tan poco original como "el cartero nunca llama dos veces".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Leyendo tu blog me llamó la atención el título del libro, "Cartas clandestinas de un catero casi enamorado"; lo compré, lo leí y estoy de acuerdo con tu opinión,es un libro con estilo, disfruté con él.

Anónimo dijo...

Leyendo tu blog me llamó la atención el título del libro, "Cartas clandestinas de un catero casi enamorado"; lo compré, lo leí y estoy de acuerdo con tu opinión,es un libro con estilo;disfruté con él.

A.Ruiz dijo...

Gracias por leer el blog.
Y hay algo en esa historia del cartero que agobia un poco, quizá las frases tan breves, entrecortadas. Pero tiene ritmo.